


Según opiniones documentadas la presidencia
de Trump va a ser más benéfica –para México--
de lo que parece.
Por Martha González Escobar.
El Washington Post describe a Trump como el primer presidente “latinoamericano” de Estados Unidos en un artículo publicado el pasado jueves 26 de enero y sugiere verlo a través de la lente del “caudillo”. Su autor, escribe que el republicano “ha importado un estilo político arraigado en la política de América Latina: la demagogia nacionalista “. Ishaan Tharoor, corresponsal internacional del diario y ex editor de la revista Time, opina lo anterior fundamentado en su conocimiento de la región ya que agregó que el magnate no es un “déspota militar” como Augusto Pinochet o un desafiante autócrata como Hugo Chávez, según los que vivieron bajo el mandato de esos líderes, parece como que Trump “ha estado tomando nota” de los ex mandatarios en América Latina.
Para Tharoor, las preferencias de Trump por los argumentos contundentes, su postura como campeón de la clase trabajadora, su desprecio hacia las élites urbanas y el funcionamiento de la política y su proyección en una especie de machismo alfa que no se atenúa con la corrección política, son rasgos asociados al caudillismo.
Lo irónico, señala el periodista, es que América Latina “ha superado ya sus días de demagogia y dictaduras, el populismo esta en retirada y las democracias están echando raíces en toda la región”.
Por su parte el investigador en Política de la Universidad de Texas, concuerda con el corresponsal y afirma que “los roles se han invertido y que quizá es tarea de los inmigrantes latinos enseñar a Estados Unidos sobre profundizar la democratización” afirma el académico en otro artículo publicado en NBC.
Pero en México el columnista partidario de AMLO, Jaime Avilés considera que “desde el 2000 se han cerrado70 mil fábricas en Estados Unidos y más de cinco millones de empleos se han ido para China y este hecho es el que explica el triunfo electoral de Trump”.
Avilés cita a un teórico político cuya opinión sobre Trump es que tiene dos objetivos muy claros: evitar atentados terroristas y devolver el empleo a Estados Unidos, lo que implica, según Avilés, pactar con Rusia y convertir a China en el “Centro de la tensión mundial”.
Mr. Trump es abominable, pero su mandato es lo mejor que podía pasarle a México. Aunque esos es muy dudoso, el columnista argumente en apoyo de su dicho que el presidente norteamericano anuló con el poder de su firma, el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (ATP, en español y TTP en Inlglés). Este acuerdo poco menos que desconocido era tan dañino para los trabajadores de los países signatarios, que fue negociado secretamente por Obama, Hillary, y los gobiernos de Canadá, México, Perú,, Chile, Japón, Australia, Nueva Zelandia, Malasia, Brunet, Singapur, Y Vietnam, en un borrador del acuerdo, se estableció que las empresas extranjeras tendrían “ mayores poderes para demandar directamente a los gobiernos firmantes en tribunales extrajudiciales, conformados de manera discrecional”.
En descargo de Peña diremos que las negociaciones de este acuerdo las inicio, en 2010, Calderón, que ya saben no se tocaba el corazón para chingarnos. Un detalle solo para imaginar el horror en que se convertiría el país por el citado Acuerdo es que una corporación extranjera podría privatizar los mantos acuíferos del país y el suministro de agua a las ciudades, y si el gobierno cediera a las presiones ciudadanas para que los inversionistas dejaran de matarnos de sed, un tribunal, por encima de las leyes internacionales, podría sancionar a nuestro gobierno y condenarnos a cobrar nuevos impuestos para indemnizar a la empresa, supuestamente, afectada. Aunque parece una leyenda de los tiempo del rey Arturo de Inglaterra, según los documentos que tiene en su poder el citado columnista y otros periodistas, así sería.
En cuanto al pago del Muro todos tenemos la esperanza que el grupo salinista será retirado del poder por la presión ciudadana y entonces Trump tendría que negociar con toda una nación y no con un grupo político cuyo poder parece declinar.
¿En que hechos se manifiesta ya esa declinación? en que Trump ha dicho que no necesita que el Salinismo continúe obligando a los mexicanos a migrar con sus políticas económicas inhumanas que han empobrecido mayoritariamente al campo y se propone deportar a millones de trabajadores mexicanos, ante lo cual salinismo no tiene respuestas ni perspectivas, ni cuadros capaces de impulsar políticas alternativas y ni siquiera una figura electoralmente atractiva para continuar en el poder en 2018.
El empobrecimiento que auguran estas medidas va a lograr que los salinistas huyan como ratas del barco que se hunde no sin antes procurarse otros milloncejos, pero se van, no tienen a qué quedarse. Dejaron el país en ruinas y para salir de la situación se necesitan muchos años de trabajo, no de métodos para hacerse del dinero de los contribuyentes.
Avilés finaliza su comentario escribiendo “Trump es un monstruo, sí, pero su proyecto proteccionista nos obligará, después de 35 años, a terminar con el régimen que destrozó este país. Por eso digo que con Trump México se sacó la lotería”.
¿Usted qué opina? Lo que el viejo refrán mexicano de: ¿No hay mal que por bien no venga.?